CARACOLES

It’s only balonmano but I like it

La columna de Juan Carlos

Pardinyes 23 - F.C.Barcelona 40 (parcial 1ª parte 12-14)

Cualquiera que hubiera visto la primera parte del partido y se hubiera ido antes de su finalización, no daría crédito al resultado final y es que, desde luego “nada sucede porque sí, nada es gratuito”. Me explicaré:

Salida….(alguno haría el chiste fácil con lo de la….”salida”…pues más de uno tiene una prima en esas condiciones), a las 7 h. 30 min. del domingo, con lo que muchos nos hemos tenido que levantar entre 6 h y 6 h. 30min, aunque otros, como nuestro hombre del Ampurdán, mucho antes.

“La primera en la frente” ha sido a pie de autocar, cuando nos hemos enterado de que aunque Javi, Joel y Quique habían regresado a las 2 h. 30 min. de la madrugada de jugar un partido con el equipo de 1ª Nac. en Puerto de Sagunto, y estaban convocados, el primero de ellos ha vuelto con “el regalito” de la rotura de uno de sus carpos del dedo índice de la mano izquierda. Total que estará entre cuatro y seis semanas de parón y, lo que es peor, se pierde la próxima convocatoria de la SEJM. Desde aquí: ¡Ánimo Javi!

Además de esta situación, contábamos ya con las ausencias conocidas de Beto por viaje de estudios en tierras Lusas ( …no de “Lusia” …listos) , Alvaro Ruiz lesionado y por tierras de lo que queda ya del Al-Andalus para estar con su familia, Rodrigo Corrales en Tierras de Celtas…..y el resto, dada la hora de inicio del partido (a las 10 h. 30 min) ………….allá “por los Cerros de Úbeda”

Por todo ello, no es de extrañar que la primera parte terminara con un esperanzador resultado para los locales de 12-14, con parciales de 2-2, 3-4, 6-6, 7-7, 9-10, 12-14. Estaba claro que nuestros amigos de “L’Aplec del caragol” tenían muy malas intenciones,…., más o menos como las de nuestro amigo algo cegato del dibujo:

La clave para mi estuvo en los muchos lanzamientos desde posiciones fáciles fallados, falta de ritmo, concentración y ….otra vez nos veíamos rondados por el fantasma del último partido contra La Salle.

La segunda parte ya fue otra cosa y los parciales lo demuestran: 13-18, 15-23, 16-26, 18-30 22-35 y 23-40. Los chavales salieron ya como un auténtico Long Train Running (Dobby Brothers 1976).

Buenas intervenciones de los porteros que propiciaban salidas rápidas a contrataque (tanto en primera como en segunda oleada), mucha más efectividad en los lanzamientos, muchas más alegría en las combinaciones, buenas acciones de coordinación y pases entre primera y segunda línea, juego más atractivo en definitiva que, sin ser la “quintaesencia del balonmanismo del mundo mundial” (los nuestros saben hacerlo mucho mejor), sí que, a los adictos a esto del handbol, que nos habíamos tenido que tragar un madrugón, y meternos “entre pecho y espalda”, 165 Km. de ida y otros tantos que nos esperaban de vuelta, nos dejaba un muy buen sabor de boca, máxime con el equipo algo diezmado como está.

Resalto el aporte de Quique en la portería, en su segundo partido de la temporada jugado con los juveniles, las habituales excelentes intervenciones de Gonzalo y la buena reacción de todos en general en la segunda parte del encuentro. Los máximos anotadores fueron Victor Montoya con 8 tantos y Marc García con 6.

Por parte del equipo local estuvo bastante bien la movilidad de todos sus jugadores, la contundencia de su lateral izquierdo (tiene un buen chut) y las penetraciones de Eduard Pifarré, demostrando, como siempre, que es un buen jugador. Se trata de un equipo este el de Pardinyes, todo de primer año (salvo dos) y con algún cadete, que quiere presentar sus credenciales de equipo a considerar de cara al año que viene.

Tras el partido y aprovechando que estábamos en tierra de “babosos, cornudos y arrastrados “….., es decir, tierra de caracoles, nos fuimos a una cercana pedanía a reponer fuerzas, donde mientras que algunos se los comían con cáscara y todo (…..de hecho salieron del local más que andando,….., deslizándose), otros ni los olíamos, no sea que se nos pegase algo.

El próximo encuentro, a jugar contra el Bordils, partido que, además de tener el aliciente de comprobar la evolución en positivo del equipo antes de la parada por aplazamiento de dos partidos, dada la presencia de algunos de nuestros jugadores con la Selección Nacional Juvenil, tiene el morbo de ver al pobre Pau Campos como “espapela” enfrentándose a sus anteriores pupilos. Espero que el organizador de fiestas y festejos de Can Barça tenga la delicadeza de poner el partido a una hora prudencial y podamos dormir algo más que en esta jornada.

Juan Carlos